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martes, julio 24, 2007

Ideologías


Estamos asistiendo en estos últimos meses (verano de 2007) a un ataque directo a la ideología de izquierdas. Alguien puede sospechar que es una falacia, que una idea no puede ser de izquierdas o de derechas, pero no es así, en las ideas no podemos dejar de lado el puntito de lo social.


El ataque es premeditado y con alevosía. Día a día asistimos a un curioso espectaculo, un nutrido grupo de periodistas e intelectuales adláteres niegan, por activa y por pasiva, que existan intelectuales de izquierda y que por ende las ideas de izquierda en sí, no existen.


En su España perfecta no pueden existir personas de izquierdas. Curioso, una España unida pero sin media España (o más de media, o un tercio, que más da). España no está compuesta por territorios, sino por personas que los habitan, y contra eso no se puede luchar.


Cierto es que la izquierda europea está sufriendo un parón. Comparativamente, el nuevo lider de la derecha europea, Sarkozy, está a años luz. Su ruptura con el pasado, decir que Mayo del 69 está lejos, muy lejos del 2007, ha dotado de fundamentos de base a toda una nueva generación de franceses. Y si Merkel ha sido capaz de revertir la situación tan delicada en la que se encontraba la unión europea, empiezan a pintar bastos para las izquierdas.


Pero la derecha española no tiene nada que ver con la europea, por mucho que intenten decorar su centro. La pérdida de Piqué, el apartar a Arenas, y relegar a Gallardón indican a las claras el camino que ha tomado la derecha.


Sería un buen punto de partida, y precisamente en estos momentos, que la izquierda comenzará a romper lazos con el pasado, condenar a los dictadores de izquierda sería un buen punto de partida, la ruptura que se espera. Y hacer, realmente y de una vez por todas, del medio ambiente y de la economía sostenible el objetivo básico devolvería a la izquierda donde debe estar.


Claro, ahora viene la sonrisa, medio ambiento y economía sostenible, ¿fácil?, recuerde, todavía los políticos no saben bien lo que es, ¿usted sí?.